sábado, noviembre 03, 2012

Volver a disfrutar

El año pasado Charly García cumplió sesenta años y a modo de celebración preparó tres shows a los que llamó “60 x 60” -editados más tarde en cd y dvd- en los que repasó los momentos más emblemáticos de su historia musical. Sesenta temas, a sus sesenta años. La crítica y la respuesta de sus fans fueron tan positivas que el legendario rockero emprendió una gira por Argentina, varios países de América Latina e incluso algunas ciudades de Estados Unidos. Esa misma gira lo traerá esta noche hasta nuestra ciudad, donde se presentará en el escenario situado en el estacionamiento del Estadio Unico, en 25 y 32.


Horas antes de su arribo, el creador de bandas emblemáticas como Sui Generis y Seru Giran habló en exclusiva con EL DIA sobre el show, su música y algunos proyectos que incluyen un concierto en el Teatro Colón.

EL REENCUENTRO

¿Con qué se va a encontrar el público en el recital de La Plata?

“Hice una recopilación del disco 60x60 y elegí los temas que más me llegaban al corazón, ensayamos muchísimo y creo que la alquimia entre los instrumentos electrónicos, los sintetizadores, y las cuerdas se está dando cada vez más al frente. Suena como una orquesta, ya no es un grupo. Es una orquesta de rock y eso me motiva porque hay armonías y melodías que estaban un poco escondidas y ahora llegan más al oído”.

Hacer “60 x 60” implicó volver la mirada atrás y analizar tu propia obra con una perspectiva totalizadora. ¿Con qué te encontraste?

“Hay mil formas de mirarla y de escucharla. Algunas canciones se destacan por la música, otras por la letra, otras por lo bien que están ensambladas la música y la letra. Y quise hacer un balance de todas esas canciones y creo que hice una cosa bastante representativa de lo que he hecho y hago. Hay algunos arreglos nuevos pero lo más lindo es que escuchás el disco y no hay una diferencia muy grande entre las canciones que tienen muchos años y las más nuevas”.

Sin embargo, cada etapa ha tenido una impronta diferente, alguna más acústica, otra más sinfónica... ¿con cuál te identificás más?

“El corazón y la mente que impulsan todo eso y que está puesta al servicio de las canciones, no cambió mucho en todo este tiempo. Los que cambiaron fueron los arreglos. Con La Máquina (de Hacer Pájaros) dividíamos el tiempo en semicorcheas, cuando lo normal es dividirlo en negras o en corcheas, y no considerábamos que una canción estuviera lista hasta que no tuviera cuatro o cinco partes diferentes. De alguna manera me siento orgulloso de haber hecho una música difícil de tocar que sin embargo llegó a la gente. No fuimos demagógicos o fiacas. De todos modos, ahora pienso que en algunas canciones hubo un exceso de arreglos, que había demasiadas notas”.

¿Te acordás de alguna?

“Por ejemplo, ‘Ah, te vi entre las luces’ tiene una música que me gusta mucho pero creo que cambia demasiado. ‘No te dejes desanimar’ es un tema que también me gusta mucho pero sobrecargamos un poco los arreglos de cuerdas.

ETAPA SOLISTA

Después de Seru Giran, de tu etapa solista, ¿cuál es tu mayor orgullo?

“‘Yendo de la cama al living’ creo que fue un quiebre, un punto que marcó un antes y un después, porque empecé a usar unas armonías de cuartas y quintas, esquivando la tercera, que es la que le da el tono a la canción. Eso le dio a la música una característica que no voy a decir que está prohibida, pero sí que es muy difícil: la ambigüedad. La obras clásicas siempre están en tono mayor o menor, lo que de alguna manera predispone a que la obra sea alegre o triste. A partir de aquel disco, el hecho de descartar la tercera le dio un sonido más hipnótico y más ambiguo a la música”.

¿Qué recuerdos guardás de tus visitas a La Plata?

“Yo fui a La Plata a tocar muchas veces, sobre todo en la época de Sui Géneris y La Máquina. Siempre me pareció un público excelente, muy receptivo y capacitado para entender las canciones quizás más complicadas. Me he perdido muchas veces... (risas) pero tengo el mejor de los recuerdos. Tengo ganas de volver”.

Por Andrés Rivelli

La música, el dibujo y un proyecto para el Teatro Colón

Otra actividad que absorbe varias horas del día del músico es el dibujo, del que disfruta casi tanto como la música.

“Siempre hubo un paralelismo entre la música y el dibujo. Tengo facilidad para las dos cosas... más para la música (risas). Y me ayuda mucho a resolver ideas, incluso hay canciones o partes musicales que las saco del dibujo. ‘Yendo de la cama al living’, por ejemplo es como una escalera, que va para abajo y luego va para arriba. Ahora, por ejemplo, estoy en un proyecto para el Colón que se va a llamar ‘Líneas paralelas’, que tiene una presencia visual muy fuerte y creo que esa inspiración se representa muy claramente en la música”.

¿Cómo es ese proyecto?

“La idea es que las líneas paralelas, por supuesto, nunca se tocan pero visualmente sí las vemos tocarse. Inspiradas en este fenómeno visual, las armonías que estoy haciendo tienen dos notas, son esas dos líneas paralelas. Y aunque todavía no tengo el final, supongo que todo terminará en una nota”.

Fuente: El Día (La Plata)

1 comentario :

Anónimo dijo...

Ojalá se le dé por fin lo del Colón, él más que nadie se merece tocar ahí