domingo, junio 02, 2013

Regresa Charly García

La última vez que Charly García (Buenos Aires, 1951) vino a Venezuela rompió una silla en el escenario del Aula Magna de la Universidad Central de Venezuela y se fue sin despedirse, dejando la tarima en la mitad de No voy en tren. Ese 2 de julio de 2005, no fue la primera ni última vez que su alocado temperamento y adicción a las drogas hizo mella en sus presentaciones.

Siete años después, el cantante llamado el "padre del rock argentino" regresa al país. Se presentará en el Anfiteatro del Sambil el próximo 15 de junio. Al parecer, ya recuperado de sus excesos y más tranquilo, según sus últimas declaraciones.

Ya no es el hombre magro que inició sus pasos en la música en agrupaciones como Sui Generis (1972-1975), La Máquina de hacer pájaros (1977 - 1978) y Serú Girán (1978-1982/1992-1993). Ahora, suma 10 kilos, debido a la rehabilitación que inició en 2008, cuando fue llevado por la justicia argentina un centro neuropsiquiátrico tras destrozar dos habitaciones de un hotel.

Antes de que el cantante, que a los cuatro años ya tocaba el piano, entrara a su reciente rehabilitación, pasó por un largo letargo, en el que su disco Kill Gil se coló en Internet en 2006. Por ese motivo su disquera no se lo publicó hasta 2010.

Ese percance lo llevó a la crisis en 2007, año en el que permaneció encerrado en su departamento en Barrio Norte, en Buenos Aires, con el teléfono cortado por falta de pago y al borde de la crisis producida por consumir altas dosis de droga, se quedó sin dinero para pagar la renta.

 "Le he encontrado el gusto a la paz. Antes vivía, de alguna manera, en guerra permanente. Al no sentirme comprendido, quería imponer mi idea de alguna forma. No sé por qué, pero esa forma agresiva creo que se me fue, la tengo adentro, pero actualmente uso más la inteligencia. Estoy en la búsqueda de algo nuevo, como siempre, pero ahora busco un cambio más radical. Tengo el desafío de competir conmigo mismo", dijo el cantautor de bigote bicolor en la última entrevista ofrecida al canal de noticias CNN en enero de este año.

No ha sido el primer intento del rebelde García por dejar sus adicciones. Después de sus producciones Tango 4 (1991) -último disco que realizó junto a su compañero Pedro Aznar- y El aguante (1998), fueron sus intentos anteriores.

También ha sido internado más de tres veces en clínicas psiquiátricas y fue botado del servicio militar obligatorio, debido a que llegó a pasear un cadáver en silla de ruedas.

Otra de sus polémicas es la complicada relación con su hijo Miguel Ángel García, que fue concebido durante su relación con la pintora y cantante María Rosa Yorio. El joven de 36 años, que resultó tan temperamental como su padre, causó una polvareda cuando criticó públicamente la relación de Charly con Mercedes "Mecha" Íñigo, una veinteañera que ya suma más de cuatro años de relación con el autor de Yendo de la cama al living.

La modelo rechazó la petición de matrimonio del pródigo músico que a los 12 años de edad, logró un diploma de concertista de música clásica del Conservatorio Thibaud Piazzini. Por ello, el hijo despotricó contra la pareja.

Genialidad musical

Pero no todo es locura y polémica con Carlos Alberto García Moreno, el verdadero nombre tras la estrella. La verdad es que ha sido uno de los primeros músicos latinoamericanos que se ha atrevido a a fusionar el rock con ritmos ajenos. Por tal motivo ha sido catalogado como un "visionario" del género.

En su amplia discografía que suma más de 30 álbumes, entre sus discos en solitario y los producidos con sus bandas, se encuentran fusiones relacionadas con el pop, como hizo en Clics modernos (1983).

Otro invento fue en Radio Pinti (1991), producción en la que experimentó con rap junto Illya Kuryaki and the Valderramas, conocido dúo argentino de hip hop compuesto por Dante Spinetta y Emmanuel Horvilleur, para cantar Rap del cantapitiño.

Y su ópera rock La hija de la lágrima (1994), uno de los disco más experimentales: 23 canciones en 68 minutos, la más corta 19 segundos y siete minutos la más larga.
Por Lorena Tasca

Fuente: El Universal (Caracas, Venezuela)

Venta de entradas (TuTicket)
 

Mapa del lugar:


View Larger Map

1 comentario :

Ernesto Farrell dijo...

Hola... No entiendo, ¿Charly, para tí, es sólo drogas, rehabilitación y excesos?... pues de eso se trata tu reseña.

Te sugiero que antes de seguir escribiendo de Charly, hagas una exahustiva investigacion sobre el rock en español y el rock argentino. Luego, de la importancia de Charly, su influencia musical y su importancia en aquellos duros años de dictaduras latinoamericanas.